cultiva, deseas que crezca sin detenerse, que el fruto sea el más hermoso jamás visto, que contenga amor; sabiduría; tenacidad; que no le falta a sus raíces pequeños hilos de llantos; penas y dolor, que sus hojas brillen con el rocío de la verdad, honestidad y respeto. Que su fruto sean tan exquisitamente perfecto con la buena voluntad; el perdón; fortaleza.... es ineludible que ese cultivo deba marchitarse cumplido su cometido, ahí tenemos la experiencia; humildad; sueños... entre sus ramas ocultas pero dejándose ver está el odio; rencor; rabia.
Todo cultivo tiene su final, LA MUERTE y depende de cada uno que tranquilidad se tiene para atesorarla.
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